El sol, de nuevo, nos acompaña durante toda la jornada, hecho que se
agradece al final de la tarde tras descender las atracciones acuáticas del
Tutuki Splash y el Gran Canyon Rapids.
Todavía rememoramos nuestro bautizo en el parque de Port Aventura con la
explosiva salida del Furius Baco, y comentamos nuestras sensaciones
gravitatorias en el tradicional Dragon Khan y la impactante Shambhala.
La
escasa afluencia al parque, nos ha permitido disfrutar de todas las demás
atracciones sin perder mucho tiempo en las esperas. Sin embargo, todos nos vamos
con muchas ganas de volver.
Para acabar nuestro viaje, mañana visitaremos el Parque Güell antes de emprender nuestro regreso a Burlada.
Para acabar nuestro viaje, mañana visitaremos el Parque Güell antes de emprender nuestro regreso a Burlada.