Buenos días a todos en el nombre de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo
Contestación de los alumnos a María
Querida María:
Recibe en este día la paz que está dentro de nosotros y no las discusiones y
peleas en las que nos enzarzamos en muchos momentos de la jornada, tanto en la
familia como en el colegio. Y, el caso es que, nos damos cuenta de que cada vez
que nos peleamos física o verbalmente, quedamos heridos, un poco tristes e
incómodos con nosotros mismos y con los demás, porque sentimos que nos hemos
hecho sufrir. Pero, como tú bien nos dices en tu carta respecto a tu pueblo,
nosotros también nos gritamos o peleamos por menos de nada casi de continuo.
Necesitamos pues, recibir ese anuncio tan importante de que la vara del opresor
o la bota del que pisa haciendo daño serán echadas al fuego para que no sigan
produciendo sufrimiento. Pero todo esto sólo será posible si en nosotros
dejamos que viva el Príncipe de la Paz, Jesús, como tú lo dejaste vivir en ti,
en tu familia y en todas las cosas de tu quehacer diario. Nos gustaría, María, que
nos ayudaras mucho en esta pacificación interior y en la convivencia con los
demás. Te lo pedimos confiadamente:
Tus queridos
alumnos del “Amor de Dios”. Besos
Podemos cantar la
paz esté con nosotros y darnos la mano o un abrazo.